Ya hace un mes que fui al Meraki Beach Hotel, un restaurante (y hotel) a primera línea de playa, en la Pobla de Vallbona. Había oído hablar de él y el destino o la casualidad hizo que hiciéramos una comida de empresa allí mismo.
Tomamos el menú, que comenzó con un gazpacho de fresas. Como todos los gazpachos, no me gustó. Me sabía a ajo y vinagre.
Seguimos con un paté de habitas que pasó sin pena ni gloria. Sinceramente, no supimos a qué sabía y tuvimos que preguntar de qué era.
Los buñuelos de bacalao estaban ricos, aunque se notaba mucho que eran congelados.
El milhojas de queso de cabra no lo probé.
Como platos principales podíamos elegir entre calamar y hortalizas, carrillera con alcachofas confitadas o arroz negro con emulsión de ajos tiernos. Yo elegí esta última opción.
Ración, pequeña. Arroz, normal, correcto.
Tenía mejor aspecto el arroz de verduras (opción vegetariana). Sin embargo, cuando lo probé no me acabó de convencer: tenía un sabor muy fuerte a especias.
De postre, un combinado a compartir: macedonia de frutas, tarta de tres chocolates y bizcocho con helado.
En definitiva, desde mi punto de vista, el Meraki Beach Hotel es un restaurante para turistas o gente que busque comer en primera línea de playa.